El Modelo Educativo TEC21 considera que el aprendizaje de los estudiantes durante sus estudios de licenciatura está centrado en la relación del alumno con su profesor y con el entorno, en el que los alumnos desarrollan competencias disciplinares y transversales, mediante la resolución de retos vinculados con problemáticas reales y demuestran su dominio a través de diversas evidencias de aprendizaje.
En este modelo, la unidad central del aprendizaje son los retos, mismo que se fundamenta en el aprendizaje vivencial. Este tiene como principio que los estudiantes aprenden mejor cuando participan de forma activa en experiencias abiertas de aprendizaje, en lugar de intervenir de manera pasiva en actividades estructuradas. Y si hablamos de un aprendizaje activo, entonces es necesario contar con espacios activos.
Si en los nuevos modelos y tendencias pedagógicas, el centro del proceso de aprendizaje ya no es el profesor sino el alumno, pierde sentido el espacio tradicional que orienta los pupitres al pizarrón. La tendencia de los centros educativos a nivel mundial se inclina más por espacios flexibles que permitan al alumno realizar múltiples funciones.
Por lo tanto, ya no podemos hablar de aulas, sino de espacios educativos.