Es común que durante nuestra interacción con el grupo identifiquemos la necesidad de modificar elementos de nuestra planeación inicial. Ampliar fechas de entrega, mover el orden de temas o cambiar su duración, agregar u omitir actividades, etcétera. En un ambiente cien por ciento presencial basta con comunicar durante una sesión a los alumnos sobre estos cambios para que puedan aplicarse, sin embargo, al adaptar tu impartición dentro de un modelo híbrido es importante considerar el impacto que cada cambio tendrá sobre lo que se encuentre en nuestra plataforma tecnológica (ambiente virtual). Por ejemplo, si solicitas alguna entrega a través de la plataforma en cierta fecha, pero durante la sesión en el aula has definido una nueva fecha, debes asegurar que la entrega de la actividad en la plataforma se encuentre disponible en la nueva fecha. Este es un solo ejemplo, pero puede ocurrir con otros elementos. Es importante que tengas pleno conocimiento de lo que impartes en formato presencial pero también de lo que contiene tu curso dentro de la plataforma o en el espacio digital que utilices.